martes, 19 de agosto de 2014

Palo si boga...

Una entrada es el texto que el diccionario dedica a cada palabra y en el que se incluye toda la información gramatical y de uso y, por descontado, la definición de las acepciones. Hay entradas de los más diversos tamaños. Buscando ejemplos de entradas copiosas en el Diccionario del español dominicano me topé con que una de las más largas es la que se le dedica al sustantivo palo. Una de las razones es que con él se han formado muchas expresiones que perviven a lo largo de los siglos.

Las de origen marinero tienen un regusto especial y nacen de la acepción de palo que designa, según el DRAE 'cada uno de los maderos que se colocan perpendicularmente a la quilla de una embarcación,  destinados a sostener las velas'. De ahí que cuando deseamos que cada palo aguante su vela pidamos que cada quien asuma las consecuencias de sus actos. Cuando un navío navegaba a palo seco lo hacía con las velas recogidas. Por eso quien pasa el día a palo seco lo hace sin comer ni beber y quien come a palo seco lo hace sin beber.
Otra acepción de palo es la que se refiere al ‘golpe’, generalmente propinado con un palo, de ahí su nombre. Las madres de antaño ofrecían jarabe de palo para tratar la malcriadez. En República Dominicana aludimos a la irreversibilidad de los hechos con una expresión muy nuestra: palo dado, ni Dios lo quita. Y, combinando la marinería y los golpes, hemos creado una expresiva variante de frase proverbial que, desgraciadamente, suele resultarnos muy útil: palo si boga, palo si no boga.  

martes, 12 de agosto de 2014

Gutenberg

              Las aguas del Rin nos condujeron a Maguncia (Mainz, en alemán). En un hermoso edificio cercano a su espléndida catedral románica entramos en una enorme bóveda blindada. Dentro de una urna a media luz, lejos del sol que nos había acompañado en las calles de la antigua Maguncia, resplandecen las dos primeras Biblias de 42 líneas, los dos primeros libros impresos, hermosos por sí mismos y también, y sobre todo, por lo que representan; un ambicioso proyecto hecho realidad por un hombre extraordinario que puso su talento al servicio de la humanidad.
              La biografía de Johannes Gensfleisch, conocido como Gutenberg, conserva un halo  misterioso, no así su obra. Gutenberg inventó un procedimiento de impresión con caracteres móviles que se convirtió en la idea originaria de la imprenta moderna. Gracias a dos préstamos de 800 florines instaló un taller en su casa natal y compuso el primer libro impreso de la historia; en dos columnas por página de 42 líneas cada una, de así su sobrenombre. Quedaron atrás las copias manuscritas. Había nacido el libro que nos acompaña hasta hoy. Las fuentes históricas hablan de 1455.
              El Museo Gutenberg, inaugurado en 1900 por ciudadanos de Maguncia para conmemorar el 500 aniversario de Johannes Gutenberg, reproduce su taller, sus técnicas y sus condiciones de trabajo. Desde Gutenberg a nuestros días repasamos la historia de la tipografía y del arte de los grabados, el denominado arte negro.
              Johannes Gutenberg murió el 3 de febrero de 1468. Su casa natal, el


Hof zum Gutenberg, y el taller que en ella construyó y que cambió el mundo lo sobrevivieron durante siglos. Un lugar mágico y emocionante que fue destruido, como tantos lugares y tantas vidas, durante la Segunda Guerra Mundial y cuyo recuerdo conservamos como un emocionante testimonio de nuestras heridas. 

Nuevo "Diccionario de la lengua española"

Ya tenemos fecha. El próximo 21 de octubre llegará a las librerías la vigesimotercera edición del Diccionario de la lengua española,  simultáneamente en todo el mundo hispanohablante.
Una vez más las 21 academias de la lengua española en el mundo han aunado esfuerzos, que tratándose de un diccionario no son pocos, para que los que hablamos español tengamos una nueva edición del DRAE. Sus novedades han estado encaminadas a cumplir tres objetivos: en palabras de la RAE, enriquecer el Diccionario, modernizarlo y hacerlo más coherente.
La primera consecuencia del enriquecimiento de un diccionario,  y la más notable,  es el aumento en el número de artículos y acepciones. El diccionario es una herramienta imprescindible para consultar palabras desconocidas pero lo es, tanto o más, para saber cómo se escriben o si son correctas las que vamos incorporando cada día. Los neologismos y la actualización del léxico están detrás de los casi 6000 artículos nuevos. Pero no todo es incorporar. Se han suprimido unos 1350 artículos. El resultado supera los 93 0000 artículos, casi 5000 más que la edición de 2001. Trescientos años después su contenido se ha duplicado.
La modernización de la estructura de los artículos del DRAE, más clara y coherente, logra que la consulta gane en agilidad y nos aporte más información. 
La coherencia del nuevo DRAE es la consecuencia de su armonización ortográfica y gramatical con las últimas obras académicas panhispánicas  (la Ortografía y la Nueva gramática de la lengua española)  y con el extraordinario Diccionario de americanismos.
El diccionario por antonomasia, nuestro diccionario -porque así consideramos al DRAE-, seguirá siendo siendo un tocho (tendrá 2400 páginas) y aspiramos a que siga siendo un mataburros, dicho esto con cariño, admiración y respeto por los que se dedican a la titánica tarea de componer diccionarios.