martes, 27 de marzo de 2012

Más sobre el gerundio


 

    Agradecemos a nuestro seguidor sus comentarios y el interés que demuestra por el buen uso de nuestra lengua. La utilización de las formas nominales del verbo no es fácil. Lo mejor para familiarizarnos con ellas es la buena lectura, imprescindible para esto como para tantas otras cosas. A pesar de todo, siempre nos plantean dudas y nos motivan a seguir aprendiendo, como bien ha hecho nuestro lector.

    Entre los artículos que ha elegido para ampliar conocimientos ha encontrado la recomendación de evitar el uso del gerundio como adjetivo especificativo referido a cosas o a hechos. El ejemplo y la propuesta que se registran en ese artículo son los siguientes:

*El juez dictó una sentencia condenando al acusado; debe decirse: El juez dictó una sentencia que condenaba al acusado.

    El error en este caso no está en la posterioridad de la acción expresada por el gerundio sino en su uso como adjetivo referido al sustantivo sentencia.

    Bienvenido a nuestra bitácora. Contamos con sus comentarios y sus aportes.



 

lunes, 26 de marzo de 2012

Cuidado que es gerundio

    Si queremos mejorar nuestra redacción debemos prestar atención al uso del gerundio, una de las tres formas nominales del verbo. El gerundio se construye añadiendo la terminación –ndo a la raíz del verbo y su uso debe limitarse a la expresión de acciones simultáneas, como en Pasó la tarde contestando correos, o que son la consecuencia de lo que se expresa mediante el verbo principal, como en Un accidente obstruyó la autopista, provocando un atasco kilométrico.

    Si lo que queremos expresar es una acción posterior a la acción indicada por el verbo principal, debemos descartar el uso del gerundio. Observemos un uso incorrecto, publicado en un artículo reciente: "Intentaron viajar ilegalmente a la isla de Puerto Rico, siendo capturados". El hecho de que la captura sea posterior al intento de viaje invalida el uso del gerundio para expresarla. Más adecuada hubiera sido la solución "Intentaron viajar ilegalmente a la isla de Puerto Rico y fueron capturados y trasladados en buque". No siempre la expresión aparentemente más rebuscada es la más indicada. La simplicidad es nuestra mejor aliada a la hora de redactar, sobre todo si nos sentimos inseguros. Es preferible utilizar frases cortas, bien puntuadas y estructuradas, que meternos en muchos berenjenales de los que después no sabemos cómo salir.

    Es el ideal clásico de la naturalidad que abogaba por "escribir como se habla". Aunque no sé yo si, en los tiempos que corren, vista la forma en la que hablamos, no será un atrevimiento hacer esta recomendación. Organicen sus ideas y exprésenlas con sencillez y corrección. Y cuidado si es gerundio.            

martes, 20 de marzo de 2012

Se merece un esfuerzo

    Tras las festividades patrias y carnavalescas llega la temporada de premios cinematográficos y musicales. La moda se ha convertido en protagonista de las ceremonias de entrega. Gracias al desfile por la alfombra roja escucharemos y leeremos infinidad de reportajes, reseñas y retransmisiones con este tema. Los periodistas especializados en la materia, y los no tanto, abusan generalmente de extranjerismos que pueden considerarse innecesarios porque cuentan con sus equivalentes en español. Nos invadirán las prendas fashion o trendy (de última moda) que serán un must have (accesorio imprescindible) para poder conseguir un look (imagen, estilo) in (a la moda, actual) o llegar al ansiado total look (imagen conjuntada o completa). Un galimatías evitable que muestra carencias en nuestro conocimiento y manejo de la lengua y poca dedicación para conseguir una expresión de calidad. Si nuestro vocabulario no es lo bastante amplio para expresar estos conceptos tan elementales en español, al menos hagamos el esfuerzo de manejar correctamente la ortografía y usar la cursiva para señalar que la palabra elegida se trata de un extranjerismo.

    Nos queda otra opción, sobre todo si aspiramos a especializarnos en un área informativa cada día más presente en los medios de comunicación y a hacerlo con altura. Elijamos, como profesionales cualificados, la opción de ampliar el léxico relacionado con nuestra área de trabajo y de profundizar en sus matices significativos. Atrevámonos a ser creativos con nuestro propio idioma para moldearlo a nuestras necesidades y realidades, respetando sus reglas. No es otra cosa lo que hacen los grandes creadores de moda a los que tanto admiramos y seguimos.          

lunes, 12 de marzo de 2012

Conferencia taller sobre El español en la República Dominicana

Pongo a su disposición esta nueva actividad de la Academia para que nos ayude a reflexionar sobre el español que hablamos. Cuento con su presencia participante, como siempre.

ACADEMIA DOMINICANA DE LA LENGUA

CORRESPONDIENTE DE LA REAL ACADEMIA ESPAÑOLA

Fundada el 12 de octubre de 1927

“La Lengua es la Patria”

Santo Domingo, República Dominicana

INVITACIÓN

     La Academia Dominicana de la Lengua se complace en invitarle a la conferencia taller sobre “El español en la República Dominicana”, que será impartida por  la Dra. María José Rincón en el marco de la Tertulia Lingüística de la Academia.

   En espera de su grata presencia, le saluda cordialmente,

Dr. Bruno Rosario Candelier

Director.-

           Lugar: C/ Mercedes 204, Ciudad Colonial

Día:      Jueves 15 de marzo de 2012.

Hora:   5:00 p. m.




Casa de las Academias, C/ Mercedes 204, Ciudad Colonial

Santo Domingo, República Dominicana


Fonofax: 809-687-9197.






La alfombra roja

    Ay, las alfombras rojas… (y las de otros colores, que también las hay). No solo sirven de prólogo a las premiaciones sino que incluso llegan a robarles el  protagonismo. Su consecuencia inmediata es la inevitable lista de hombres y mujeres destacados por sus galas o por su mal gusto. Volveremos a toparnos con las esperadas y temidas listas de las mujeres y los hombres mejor y peor vestidos.

    Con ellas llegará la muy repetida incorrección de hacer que el comparativo del adverbio concuerde en número con el participio. Acudamos a los ejemplos para que nos ayuden a ver dónde está el error. Seguro que más de una vez escucharemos hablar de *las personas mejores y peores vestidas. En este tipo de frases mejor y peor deben permanecer sin cambios, porque funcionan como comparativos o superlativos de los adverbios bien y mal. Los adverbios, como recordarán, son palabras invariables y no experimentan cambios de género ni de número. El error es más común de lo que podríamos pensar porque esta forma de expresar el grado de adecuación, para lo bueno o para lo malo, es muy frecuente. La usamos cuando hablamos de las escuelas peor equipadas de la región, de los jóvenes mejor dispuestos para enfrentar el futuro o de los políticos peor preparados para desempeñar sus cargos.

    En cambio, si comparativo o  superlativo corresponden a los adjetivos bueno y malo deben concordar en género y número con el sustantivo al que acompañen. Pediremos mejores equipamientos para nuestras escuelas, nos alegraremos por la mejor disposición de nuestros jóvenes y trataremos de no resignarnos a las peores condiciones de vida.         


 

martes, 6 de marzo de 2012

Premios y premiados

Los premios cinematográficos y musicales, de los que abundan en esta temporada, tienen también sus indicaciones ortográficas particulares, sobre todo en lo que al uso de las mayúsculas y minúsculas se refiere. El nombre propio del premio que se otorga debe escribirse en mayúscula; así asistimos a la entrega de los Óscar en Estados Unidos, de los Goya en España y, con mayor cercanía, a la de los Casandra en nuestra República Dominicana. Si vamos a utilizar la denominación completa debemos emplear las mayúsculas iniciales para todas las palabras significativas: Premios Globos de Oro, Premios del Cine Europeo o Premios Casandra. Para las distintas especialidades o categorías se recomiendan las minúsculas: Óscar al mejor guion original, Casandra al programa diario de variedades.

En el caso de los Casandra, como en el de la mayoría de los premios similares, el reconocimiento se materializa mediante la entrega de una estatuilla que se conoce con el mismo nombre de los premios. Si nos referimos a esta estatuilla o a la persona que la ha recibido debemos elegir la minúscula inicial, porque en este uso el nombre funciona como sustantivo común. Unos veremos desfilar a los casandras de este año; otros posarán emocionados con sus goyas al final de la ceremonia; muchos se sentirán decepcionados por no volver a sus casas con el óscar en las manos. La temporada de premios nos dejará, un año más, el regusto agridulce del éxito reconocido y de lo que seríamos capaces de llegar a hacer si la educación y la cultura fueran prioritarias.